Dracorumtales
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LA SOCIEDAD WARGONTEEDAH

Los wargonteedahs son una raza de hombres pez que habitan en el poblado que se extiende bajo la laguna cercana a los Montes Teedah y las profundidades de los Mares del Norte. Se encuentran bajo la protección del Rey Delfín y no suelen salir a la superficie (son realmente anfibios). Durante la guerra contra el imperio, algunos de sus guerreros de élite se han unido a la rebelión. Suelen frecuentar Brumaria y Niice. Esta última además les venera como emisarios de su dios (el Rey Delfín). Son muy buenos curanderos y les gusta transmitir ese conocimiento en concreto, razón por la que la Iglesia del Priorato del Norte (afincada en Niice) se especializa en la sanación. De este lugar proviene la práctica totalidad de las técnicas de medicina y cirugía que se emplean en todo Dracorum.

Físicamente son peces antropomorfos. Es raro distinguir su sexo, pues su aspecto apenas difiere. Se dedican sobre todo a la medicina y, de vez en cuando, suben a la superficie a comerciar o a transmitir sus enseñanzas en las ciencias de la medicina.

Son muy quisquillosos con los invitados, pues no les gustan los visitantes no deseados.

Aunque no es lo común, tienen un pequeño ejército para proteger al rey y a su deidad protectora (el Rey Delfín).

Raras veces invitan a gente de la superficie a sus aguas, con la salvedad de los clérigos del Priorato del Norte o reyes. Para tales casos, cultivan las hojas de megera; una hierba que confiere la habilidad de respirar bajo el agua a aquel que las mastique.

Su sociedad se compone de diversos clanes, liderado por un “Skalk”. Este término significa algo así como “anciano sabio” en su lengua. Dicho Skalk cuenta con una pequeña cohorte de guerreros que actúan como guardaespaldas. Todos los Skalks sirven al rey que gobierna su sociedad por lo que rara vez se han producido enfrentamientos entre clanes.

Al no ser guerreros demasiado duchos en el arte del combate, prefieren armas de media o larga distancia (como lanzas, o cañones de agua a presión). También emplean diferentes animales y bestias acuáticas domesticadas que usan como monturas.

En el agua, pese a sus carencias marciales, pueden ser rivales más que dignos ya que, pese a no contar con una gran destreza o fuerza física, su velocidad en su elemento es extremadamente rápida. Este hecho, unido al alcance de sus armas hace que no sea sabio enfrentarse a ellos en combate submarino.

En dicho caso, un hechizo de afinidad de rayo puede ser la solución, pero también afectaría al conjurador si este no toma precauciones.

Sus soldados de élite, sin embargo, suelen vestir armaduras recubiertas de cerámica. Este material aislante presenta una baja absorción de humedad y una gran resistencia al impacto, por lo que lo convierte en el compañero ideal.

Por el contrario, la cerámica los hace algo más lentos, pero los que son capaces de vestir estas armaduras han superado con creces los límites de sus congéneres. Esto hace que la diferencia en la velocidad de movimiento sea relativamente pequeña.

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